Aida nos cuenta hoy su historia, la historia de un adiós, un adiós a un amor verdadero pero no consolidado. Sufrida y decepcionada opta por retirarse de la batalla que supone su amor. «Tuve que decir adios«
Hola, en este momento la verdad es que tengo mucha tristeza, la vida se ha encargado de no ser fácil y ya estoy y me siento vencía, sin fuerzas. En el amor he tenido muy mala suerte, muchas decepciones, y ahora tuve que decir adiós a un hombre que amo, pero el solo siente cariño, hemos pasado maravillosos momentos, pero entre sus cosas yo soy la última de la lista, no es un hombre malo, bueno en realidad me fui ilusionando o enamorando de quien ni podía. Él es menor que yo, aunque él dice, que la edad no le importa y dice quererme, pero sus actitudes dicen otra cosa, yo siento que me quiere, pero no como yo a él. Les confieso que en este mismo momento estoy llorando y sufriendo de solo pensar que no lo voy a
volver a ver, ni escuchar, pero no hay nada que hacer, no se puede obligar a querer.
Solo espero que ya la vida no siga siendo dura conmigo (no sé qué daño he hecho, no me considero una mujer mala para pagar con tantas lagrimas).
También espero que la vida siempre le sonría a Juan, mi gordo como le decía. En este adiós espero que nunca olvides que existió una mujer que te amo con todo su corazón.