Porque nos empeñamos en destruir la belleza del amor, una traición a un amor verdadero termina por destruirlo por completo.
En el pintoresco pueblo de Bellavista, Federico y Nicoletta vivían una historia que parecía sacada de un cuento de hadas. Sus risas resonaban en los callejones empedrados, y sus manos entrelazadas eran un reflejo del amor que compartían. Ambos eran jóvenes y estaban convencidos de que habían encontrado en el otro a su alma gemela.Federico, un apasionado músico local, había conocido a Nicoletta en una feria de arte del pueblo. Su belleza etérea y su sonrisa contagiosa lo habían cautivado desde el primer momento. No pasó mucho tiempo antes de que sus encuentros casuales se convirtieran en citas regulares, [Leer más…]