Amor

Un amor intenso

Un amor intenso, que decir en un caso así, amar y ser amada a sabiendas de que no puede ser, amor de verdad?, locura?, quien sabe los sentimientos de nuestro propio corazón. Es duro dejar atras a quien amas de verdad sintiendo que solo eres «la otra». Una pregunta al aire. ¿A quien ama de verdad una persona que se comporta así…?

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Todo comenzó cuando tenía 17 años; yo vivía muy feliz de la vida no me quejaba de nada todo era perfecto para mí, me gustaba estar tranquila sin nadie que me diga que hacer, amaba mi libertad por parte de mis padres porque casi nunca estuvieron cerca de mí por sus trabajos según ellos y no tuve el cariño que necesitaba, ni la compresión. Bueno yo soy una chica extrovertida felizmente me llevaba bien con todos y también era muy buena con mis estudios, no influyó para nada lo de mis papás, será que estaba acostumbrada desde que estaba pequeña además tenía que ser el ejemplo por ser la mayor para mis hermanitas a las que amo y adoro totalmente, son mi vida y daría todo por ellas.
Comenzó cuando me mudé para ir a la Universidad en otra ciudad y allí vivía yo sola en un departamento pequeño, no me quejo me gustaba estar sola, pero extrañaba a mis hermanitas y a mis amigos; bueno les diré que yo nunca me había enamorado de nadie en mi vida, nadie había llegado a enamorarme (no caía en sus mentiras, ni en sus juegos o simplemente no eran mi tipo jaja), me gustaban sí, pero nada más que eso.
Estaba sociabilizándome con mis nuevos compañeros, conociéndonos y todo lo demás, pero nunca pensé que mi vida cambiaría ahí. Todo transcurrió con normalidad ese día hasta que lo vi por primera vez, me quedé con la boca abierta, se los juro y no solamente yo, era completamente atractivo, un adonis frente a mí, creo que fue amor a primera vista, vestía elegante con un buen porte, medía como 1.75, una mirada que mata y una sonrisa preciosa; se presentó nos dijo que se llamaba Dr. Eduardo Jiménez, mis nuevas amigas se rieron de mí al verme así como una tonta; él nos explicó su método de calificación en todo el semestre y demás cosas. Me comentaron, que tenía como 29 años, era muy mayor lo sé, pero no me culpen, era perfecto aún con la edad, también me dijeron que estaba comprometido y el mundo se me vino abajo, no, es una broma jajaja no había porqué, pues solo me gustaba y nada más era como un amor platónico de esos inalcanzables, además no tendría ni la posibilidad ya que ni se fijó en mí cuando se presentó; ¿sería así siempre? Bueno no lo sabía, después en las próximas clases que tenía con él, en ese día pasó algo, mientras iba distraída con el móvil en la mano tropecé con alguien y casi caí pero no pasó porque ese alguien me sostuvo, no me di cuenta de quién era hasta levantar la mirada para agradecerle y para mi sorpresa era él, Eduardo, sentí una sensación tan extraña en mí que no sé cómo explicarlo la verdad, me quedé quieta al ver que me cogía de la cintura, me alejé rápidamente nerviosa disculpándome por lo sucedido, me preguntó si estaba bien le respondí que sí y se fue. Desde ese momento ya no lo veía igual que antes era mucho más para mí pero era consciente que eso era imposible; Eduardo entro al aula me miró creo que reconociéndome, pues estaba sentada en la primera fila y siguió sus clases que la pasábamos muy bien no lo dudo era increíble nos fue conociendo a todos por nuestros nombres y mantenía una buena relación con todos; en fin me convencía que él no podría tomarme en cuenta por muchas razones entre ellas que yo era una simple alumna, además como les decía antes nada más era un platónico para mí así que seguí con lo mío, con mis estudios y mis amigos, a veces en las fiestas o en alguna cosa.
Un día en clases Eduardo me pidió que esperara en la salida porque tenía que hablar conmigo, estaba muy confundida no sabía por qué pues no le había dado motivos, ya que era muy buena en su clase. Esperé a que se fueran todos mis compañeros del aula, me acerqué a su escritorio y le pregunté de que quería hablar conmigo, no me respondió nada al instante se tomó su tiempo, fue directo y me dijo de porqué lo ve a mucho en clase, era absurdo pues tenía que mirarlo no? o si no cómo pondría atención en las clases y se lo dije así, y me dijo que esa no era su pregunta sino la forma en que lo veía, no supe que responderle y solo le dije que no entendía su pregunta, se paró, caminó hacia mí y me dijo «esa forma en que me ves justo ahora» estaba super nerviosa sin saber que decir y me giré evitando su mirada, me preguntaba yo, se había dado cuenta? me volteó con su mano para que lo viera, me miró y me besó, jamás lo vi venir fue una sorpresa muy grande para mí, sin saber que hacer al principio, pero luego al sentirlo tan cerca de mí las emociones me traicionaron y caí rendida a sus besos correspondiéndole sintiéndome flotar en las nubes pensando que era solo un sueño, después se me vino a la mente lo de su compromiso y también en mi novio no se los había mencionado pero llevaba un mes con él, que estaba muy enamorado de mí… yo no, pero disfrutaba de su compañía; y lo aparté de golpe de mí le dije que hacíamos mal y que él lo sabía, no me respondió nada y siguió besándome, después me dijo que ya era de noche y me llevó a mi casa, no dijimos nada en el camino. Esa noche no podía dormir pensando en él me sentía en un sueño, ese beso lo había deseado muchas veces, pero nunca pensé que se haría real. Y desde ese momento no sabía que iba a pasar, me llegó una solicitud de amistad a mi Facebook y era él, lo acepté de inmediato por la emoción, me escribió diciéndome que no podía dormir por mi culpa, para mí empezó como un juego y le respondí que yo igual, me confeso que le gustaba demasiado hace mucho tiempo, que era hermosa y encantadora, y yo en broma le respondí – sólo te gusto? qué pena yo te amado siempre – jajaja me entretenía con él; y así estuvimos hablando por chat casi siempre de muchas cosas para mí se me hacía divertido y excitante a la vez, nuestras conversaciones nos llevaban a más, algunas veces a unas calientes se podría decir pero yo sólo le seguía el juego porque sabía que él pronto se casaría con su prometida y evitaba ilusionarme porque sabía que podría salir lastimada, en clases todo era normal pero siempre había miradas de complicidad entre nosotros me encantaba lo admito era maravilloso para mí, pero aun así era un amor imposible y eso me deprimía. Terminé con mi novio que a la vez era mi mejor amigo, no me pidió ninguna explicación porque sabía que yo no lo amaba y él lo tenía en claro, no nos volvimos a hablar después de bastante tiempo.
Decidí ya no hablar más con Eduardo porqué me hacía daño yo misma y lo evitaba de muchas formas incluso en clases ya no era la misma con él. Una vez se me hizo muy de noche con mi amiga, tenía que volver a casa, caminando al paradero de autobuses empezó a llover para mi mala suerte no tenía nada para abrigarme y ya estaba completamente empapada, esperando por un momento decidí tomar mejor un taxi pero todas las que pasaban tenían clientes a causa de la lluvia esperando, un auto se paró frente a mí y adivinen qué, sí era Eduardo, pensé que sólo en las películas pasaban esas cosas jaja pero no, me dijo que subiera, no quise hacerlo pero el frio pudo más conmigo y tuve que aceptar, me llevó a mi departamento, lo invite a pasar para tomar algo y aceptó aun esperando a que no lo hiciera, me bañe y cambie muy rápido, cuando salí de la ducha él estaba viendo los libros que tenía coleccionadas, me comentó de ellos también dándole yo mi opinión, después me preguntó por qué estaba evadiéndolo todos los días, preguntándome si había hecho algo malo que me molestara, yo le dije que no era nada de eso, me dijo también que se había enterado de mi separación con mi ex novio y que lo sentía mucho, ya que se sentía culpable pidiéndome perdón; lo miraba y moría por dentro, quería gritarle que lo amaba y que nada era culpa suya pero no podía, le dije que se marchara sin darle explicaciones, quería llorar pero no quería que me viera así, me volteé con dirección a mi habitación, me abrazó y las lágrimas caían de mí sin parar, lo empuje para que se fuera ya, pero no me hacía caso, se quedaba ahí quieto a mis golpes diciéndome que lo sentía, le dije que no!! Y fue ahí cuando le dije que lo amaba intensamente que ya no aguantaba fingirlo, que me sentía mal por ello, él se quedó sorprendido por mi confesión y me dijo que él también estaba enamorado de mí, besándome tiernamente, esa noche se quedó conmigo, no pasó nada de lo que ustedes piensan, solamente dormimos abrazados. Desde aquél día todo cambio entre los dos, ya nada fue como antes nos tratábamos mucho más, lo nuestro fue un amor de verdad, lo sé porque me hacía sentir así, me sentía amada completamente por él, lo amaba demasiado, mi primera vez fue con él e hicimos muchas veces el amor me entregaba a él por amor y por sentirlo más, con él conocí muchas cosas, entre ellas el placer, aun sabiendo que no era mío en realidad y sabiendo que yo era la otra, la conciencia y el remordimiento me llegaban una y otra vez, después de un tiempo largo le dije que lo nuestro no puede ser y tenía que terminar por lo de su compromiso. No quiso, ni aceptó lo que le dije, diciéndome que no podía dejarme ir, entonces le hice escoger entre ella y yo, sabiendo que sería yo quien perdería porque ellos tenían ya cinco años de relación y no podía competir con ella, ni echar esos años al agua simplemente por una simple chica de 18 años como yo, que aún estaba en la Universidad. Sabía desde el principio que un nosotros era imposible, pero los momentos que viví con él fueron mágicos, como un sueño para mí y eran reales, los cuales agradecí con todo mi corazón.
Seguí mi vida con dificultad, sin escuchar su respuesta, pero la sabía. Mis días transcurrieron normalmente, pero muy dentro de mí quería llorar, gritar, pero no podía, tenía que olvidarlo, consumiéndome en una tristeza enorme, pero era lo mejor. Lo amé, lo amo y lo amaré siempre. Adiós mi amor… ❤️

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