Es quizás en el amor donde la vida es más injusta a veces, aunque hay injusticias más grandes, son las del amor las que más duelen en lo más profundo de tu ser y las que más perduran en el tiempo.
Pasaron muchos años hasta que la volví a ver de nuevo. Era Alba, mi gran amor de juventud, vivimos un bonito romance en aquellos tiempos, pero nuestros jóvenes corazones no fueron capaces de mantener vivo aquel amor. La inmadurez y la desconfianza termino por separarnos, pero aun así nunca me olvide de ella.